Barcelona lleva años siendo una de las urbes españolas que registran mayores cantidades de visitantes sobre todo en la estación veraniega, lo cual no es de extrañar teniendo en cuenta las características tan positivas de las que presume la Ciudad Condal. Sin embargo, muchos viajeros de nuestro país siguen mostrándose reticentes a acudir a ella principalmente por el factor monetario. Y es que la capital catalana siempre ha tenido fama de no ser demasiado asequible especialmente si se hace acto de presencia en ella durante los meses de mayor afluencia turística. Afortunadamente, poniendo en práctica una serie de pautas existe la posibilidad de disfrutar al máximo de Barcelona sin que la economía doméstica sufra a causa de ello.