Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

Opinión

Redacción Capital

Todos somos startups

Cualquier organización precisa agilidad y flexibilidad para mantenerse competitiva y rentable en un entorno que cambia cada vez más rápido. Estos ingredientes se obtienen del comportamiento emprendedor, que hay que saber adoptar y capturar. Hoy ya nadie cuestiona que es imperativo en las compañías establecidas adoptar los comportamientos del emprendedor, así como colaborar con emprendedores que son más ágiles que la organización incumbente. Todos somos startups, hoy más que nunca. Esto es algo que se ha intensificado aún más gracias a una pandemia que ha puesto a prueba a todas las organizaciones, ofreciéndonos una ola de oportunidades de negocio, pero también sometiéndonos a un auténtico test de fuerza para comprobar lo flexibles que podemos llegar a ser.

Es crucial instaurar un sistema operativo de emprendimiento corporativo de forma profesionalizada y bien planificada, integral y no como una iniciativa asilada, evitando agravios comparativos entre nuestros intraemprendedores y los emprendedores externos. Por ello, recomendamos instaurar el sistema primero dentro de nuestra organización, para luego abrirlo al exterior.

Nuestros casos de éxito en emprendimiento corporativo con compañías de diversa naturaleza, como cotizadas en el IBEX, empresas familiares o medianas empresas, coinciden en la elevada rentabilidad de este tipo de iniciativas por su impacto en la cuenta de resultados. Tanto la innovación que proviene de nuestros equipos, como la que capturamos en colaboración con startups, proporcionan un radar inigualable para navegar en un entorno turbulento sin precedentes.

No olvidemos que el reto será integrar y alinear dos ámbitos de naturaleza muy distinta y casi opuesta, los emprendedores o intraemprendedores orientados a explorar, con los miembros del equipo más “tradicionales” orientados a explotar, combinando velocidades de largo plazo con las de corto plazo, conviviendo muchas veces bajo un mismo techo y en el marco de un mismo plan estratégico.

Varios son los ejes del comportamiento emprendedor que lo hacen vital en la actualidad

1)CUESTIÓNALO TODO E INVITA A HACER PREGUNTAS CONSTANTEMENTE. Pregúntate por qué para después evolucionar hacia preguntas del tipo ¿Y si…?. El impacto de las tecnologías, en especial las de evolución exponencial, empoderan a emprendedores y compañías para diseñar soluciones que antes eran imposibles. Si eres capaz de canalizar su potencial, su rápido impacto te desmarcará de los competidores antes de que puedan reaccionar.

2) EXPLORA MÁS ALLÁ DE LO INCREMENTAL Y ADÉNTRATE EN EL ESPACIO DE LA DISRUPCIÓN, AUNQUE DUELA. Porque implica cuestionar el negocio tradicional y puede llegar a ser substitutivo, por eso las compañías tradicionales siempre llegan tarde a la disrupción en su sector, que es provocada por empresas que se diseñan de forma fresca desde la nada, que no provienen de esa industria y que se apalancan en nuevas tecnologías.

3) RECONOCER QUE DEBEMOS DEJAR DE PROTEGER LO TRADICIONAL E INVITAR A LA TRANSFORMACIÓN desde un plano de diseñar, incubar y madurar la startup que un día acabe “matando” tu empresa. No es tarea fácil y requiere un cambio de mentalidad y cultura profundo.

4) EL SENTIDO DEL HUMOR Y LA DIVERSIÓN SON COMBUSTIBLES EFECTIVOS PARA DINAMIZAR TU ORGANIZACIÓN, muy ligados a la pasión y al optimismo. Aunque no haya estudios científicos que lo prueben, en mi trayectoria de más de 20 años innovando nunca he visto proyectos exitosos impulsados por infelices o pesimistas.

5) GENERA CULTURA DE ORIENTACIÓN AL CLIENTE, CREANDO UN AFÁN POR ENTREGAR NUEVOS BENEFICIOS EN CLAVE DE PROPUESTAS DE VALOR efectivas y verdaderamente apreciadas en el mercado. Una tecnología no tiene valor hasta que soluciona un problema o cubre una necesidad.

6) ADOPTA LA CULTURA DEL FALLO O EL ERROR BIEN INTENCIONADO, BAJO CONTROL Y COMO METODOLOGÍA DE APRENDIZAJE Y RETROALIMENTACIÓN. No se sabe si funciona hasta que lo lanzas al mercado. Validar temprano con clientes tus hipótesis es infinitamente más rápido y barato que planificar en largos procesos que muchas veces conllevan desarrollos costosos guiados por tradicionales presupuestos asignados e inercia corporativa basada en planificación obsoleta en entornos tan dinámicos.

7) DEMOCRATIZA LA INNOVACIÓN, DEMANDANDO RESULTADOS Y EXIGIENDO RESPONSABILIDAD a cualquier miembro del equipo, y a la vez reconoce y recompensa adecuadamente para incentivar y sostener los niveles de motivación y energía.

Las organizaciones que recuperan el espíritu emprendedor que en su momento provocó su nacimiento disfrutan de un proceso de rejuvenecimiento y revitalización, energizando los equipos para afrontar cualquier nuevo reto. BIENVENIDOS LOS EMPRENDEDORES, BIENVENIDOS LOS REBELDES. •••

Este artículo de opinión ha sido redactado por Joan Riera,
Presidente de Active Development y Profesor de ESADE del Departamento de Estrategia y Dirección .

Únete a nuestra Newsletter

A través de nuestra Newsletter con Capital te hacemos llegar lo más importante que ocurre en el mundo de la #economía, los #negocios, las #empresas, etc… Desde las últimas noticias hasta un resumen con toda la información más relevante al final del día, con toda comodidad.